Son un entrante estupendo, fácil, rápido y le gusta a todo el mundo. Además de este relleno, se pueden hacer un montón más igual de fáciles. Aunque parezca una receta muy larga (he escrito muchísimo hoy) es muy fácil.Ingredientes:
- Volovanes (se pueden hacer, o comprar hechos en cualquier super, o encargarlos a una pastelería)
- 250 grs de gambas pequeñas, peladas, “descabezadas” y cortadas en dos o tres trozos
- La parte blanca de 2 puerros muy picada
- 2 cucharadas soperas de harina
- Leche, aproximadamente ½ ó ¾ litro
- Sal, pimienta blanca, mantequilla y aceite
En una sartén con un poco de aceite, rehogamos los puerros a fuego muy suave y tapados, moviendo cada poco tiempo.
Mientras se hace el puerro (y sin olvidarnos de él), en otra sartén a fuego suave ponemos una cucharada sopera de mantequilla y otra de aceite, cuando la mantequilla esté derretida, añadimos la harina y mezclamos bien con una cuchara de madera y vamos moviendo hasta que la harina esté ligeramente tostada. Hay que tener mucho cuidado para que no se tueste demasiado, así que si lo dejamos para mover el puerro que está en la otra sartén, mejor apartar ésta del fuego. Cuando esté tostadita, añadimos la leche caliente y movemos rápido con unas varillas mientras vamos añadiendo leche (espesará rapidísimo, así que hay que ir con cuidado).
Si quedan grumos, no pasa nada, se pone todo en el vaso de la batidora y se le pasa la minipimer. Lo volvemos a poner al fuego y movemos todo el rato hasta que quede una bechamel bien espesa. Salamos y añadimos pimienta blanca recién molida.
Si nos hemos pasado con la leche y no espesa del todo, siempre se puede añadir un poco de maicena disuelta en un pelín de agua o un espesante de maicena que se añade directamente a la salsa. Aunque es mejor añadir la leche poco a poco que tener que añadir cosas raras de estas. Si los puerros ya están hechos mientras hacemos la bechamel, apagamos el fuego y los dejamos esperando.
Cuando los puerros estén hechos, subimos el fuego (o lo volvemos a encender) y añadimos las gambas con sal. Dejamos que se hagan moviendo. Es mejor que no se hagan mucho, porque luego se mezclarán con la bechamel caliente y, además, se meterán en el horno…
Cuando estén medio hechas las gambas, las mezclamos con la bechamel y, si no se van a comer en el momento lo dejamos enfriar.
Cuando esté fría, rellenamos los volovanes y calentamos en el horno.
Si se van a comer en el mismo momento de hacerlos, los rellenamos con la mezcla caliente y damos un último calentón en el horno fuerte para que se caliente el hojaldre. Es importante servirlos muy calientes.
Es importante no rellenar los volovanes con demasiada antelación, porque el hojaldre se humedecerá y quedará chicloso.
Se puede hacer el mismo relleno, pero con pollo cortado a daditos en vez de gambas, o con champiñones O con cangrejo, o rape y langostinos... Incluso con jamón dulce cortado en daditos pequeños y queso rallado (estos les encantan a los niños). O con espinacas…
2 comentarios:
Hola, sigo con atención su blog, y, para su estímulo, echo de menos sus recetas los días que no publica.
Hola, su página es muy interesante y le aliento a seguir delante con ella teniendo asegurada una lectora en mi persona.
En cuanto a la receta de los vulevanes, que me resulta especialmente apreciable pues me traen recuerdos de mi infancia, le rogaria si podia incluir la receta de la masa, dado que detesto los alimentos industriales.
Agradeciendole de antemano su respuesta, le felicito una vez más por tan suculenta página.
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