Ingredientes:
- 1 paquete (creo que son de 250 grs) de mantequilla con sal. No vale margarina, ni mantequilla baja en grasas de esa que hacen ahora, tiene que ser mantequilla de verdad.
- Un diente de ajo bien picado en el mortero
- Un par de cucharadas de zumo de limón
- Perejil fresco picado (como unas 4 cucharadas soperas colmadas, se puede usar un paquetito de esos que venden congelados, aunque siempre es mejor el fresco).
Sacamos la mantequilla de la nevera, la ponemos en un bol y la dejamos templar hasta que esté bien blandita. Mezclamos el ajo y el zumo de limón en el mortero y lo añadimos a la mantequilla, lo mezclamos todo muy bien con un tenedor o una batidora con varillas. Cuando tengamos una mezcla homogénea, añadimos el perejil y seguimos batiendo hasta que también esté bien mezclado. Y ya está listo.
Ponemos la mezcla en un papel film y le damos forma de cilindro (se puede usar una esterilla de las de hacer sushi para darle la forma). Lo metemos en la nevera para que se endurezca y cuando esté duro, lo cortamos en rodajas de un dedo de grosor, las envolvemos por separado en papel film y lo congelamos hasta que lo vayamos a usar. También se puede guardar en la nevera durante una semana más o menos, no más, porque se acaba poniendo rancia...
Esta es la receta más simple. Se puede usar cualquier combinación de hierbas que se nos ocurra. Yo suelo usar perejil y eneldo a partes iguales para tomar con pescado o para poner en el pan para hacer canapés o sándwiches de salmón ahumado; de pereijl, tomillo y romero para tomar con carnes a la brasa; con salvia, con cebollino...
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